12.18.2006

El blog al desnudo.

En la vida muchos compartimos un miedo, el miedo a no trascender, a perdernos en el mundo, a morir. Por ello, yo ya sembré mi arbolito, estoy en eso de escribir un libro (aunque sea de chistes maletones), y bueno, eso del hijo… bueno, eso tal vez la naturaleza me lo perdone ya que sabemos que hay genes que no deben perpetuarse. Volviendo al tema, cualquier cosa que hagamos, sabemos que debe tener un sello que le permita a nuestra personalidad traspasar el tiempo que nosotros no podemos, un hombre se puede definir en su obra. Sin embargo, existen loables excepciones que nos enseñan que un hombre puede hacer de su vida su mejor obra.

William Seward Burroughs II escribió un libro considerado como un clásico del Movimiento Beat, The Naked Lunch , y creo que, para éste sujeto su vida fue su obra más importante. Novelista, ensayista, pintor, crítico social y orador de performance. La mayor parte de su obra es de carácter semi-biográfico y eso fue porque el individuo tenía mucho de qué escribir, de allí que su vida rebasara su obra. Burroughs (1914-1993) vivió en lo que llamaríamos los límites de la sociedad. Drogadicto, homosexual, más de una vez prófugo de la justica, mató a un amigo y a su esposa –Joan, de manera accidental, y es ésta última muerte la que lo lleva a escribir.




"I am forced to the appalling conclusion that I would have never become a writer but for Joan's death... I live with the constant threat of possession, for control. So the death of Joan brought me in contact with the invador [sic], the Ugly Spirit, and maneuvered me into a life long struggle, in which I have had no choice except to write my way out"



William S. Burroughs es llamado uno de los mejores escritores y más influyentes del siglo XX. Creó una técnica llamada cut-up, en la que, a diferencia del dadaísmo en donde las palabras tienen un orden aleatorio, el cut-up (corte) representa un collage de capítulos y párrafos. Incluso escritores contemporáneos del género de ciencia y ficción sigue citándolo como influencia. Así mismo, su obra se proyectó más lejos de la literatura, llegó a la música en donde colaboró haciendo speeches con músicos como Tom Waits, Kurt Cobain, R.E.M., Bill Laswel, entre otros, esto incluye un trabajo con los Doors no con una ouija, sino leyendo con su voz sonora poemas de Jim Morrison con fondo de música de los Doors.

Y bueno, mejor me detengo porque no quiero hacer una serie de anotaciones de esas que hacen los “estudiosos” o los “intelectuales” sobre el significado de tales o cuáles cosas que marcaron la vida de Burroughs, ni hacer un odioso ensayo al estilo copy-paste. Lo que quiero remarcar son las ideas que saltaron a mi mente después de chutarme su biografía (que en serio es una Biblia en potencia):

Uno. Este señor fue drogadicto durante 15 años –declara, y define droga como término genérico para el opio y/o sus derivados, incluyendo todos los sintéticos, del demerol al palfium. ¡15 años! Y murió a los 83 años de un paro cardiaco resultado un primer paro cardiaco mal cuidado, y además no llegó a los 83 chocheando, sino que era un ente totalmente productivo para ese entonces.¡No ma…! Eso es tener complexión, yo apenas me echo un cigarrito nicotínico totalmente legal y ya estoy con el calambre en el chamorro.

Y dos. (Sí, inútilmente sólo pude pensar dos) Que en el mundo existen dos tipos de personas, las que viven su vida y las que viven las vidas de éstas primeras. Burroughs fue un sujeto incansable, su vida está rodeada de polémica, de experiencias poco cotidianas y de redefiniciones que pocas personas se atreven a hacer. Si hubiera un TVNotas literario, Burroughs hubiera sido la Niurka del momento. Hay personas que viven de buscar minuciosamente hasta el último detalle de una vida que no es suya, y de encontrarle un sentido, y de pensar posibles razones a los actos ajenos. Tendemos a ver la vida de los demás mórbidamente, y esta es parte de la gran maquina que tiene a programas como Ventaneando funcionando, y a las vecinas de mi edificio platicando. Creo que si en este mundo, todos pudiéramos dejar de tener posiciones de “merde” dentro de éste sistema, nos sentiríamos lo suficientemente valiosos para ver nuestros logros y reconocer la dificultad en los logros ajenos.

Con esto no quiero exhortar a todos a que imiten la vida de W. Burroughs esperando ser también una figura mítica del siglo XX, con eso de que esta in tener una enfermedad mental o haber estado en un manicomio o en un centro de rehabilitación. Mi punto es que se debería inculcar el “ser”, en lugar de que nos vendan personalidades pre-hechas. Los existencialistas ateos mencionan que la existencia precede a la esencia, lo que indica que los ser humanos tenemos que inventarnos una esencia, una definición propia, que además crea responsabilidad en el ser mas que una perpetua depresión (que es cómo nos han intentado despachar el existencialismo). La Generación Beat, de la que Burroughs fué precursor, surgió después de la corriente existencialista de Sartre, en un momento de posguerra; y su concepto es más que el molido o machacado (beat, en inglés), es también el término beato, pulsante y vibrante. Su legado, el de Burroughs, debe de existir más allá de libros titulados Burroughs para principiantes, creo que de ser más, como la mismísima palabra Beat.


Sólo hay una cosa de la que puede escribir un escritor: lo que está ante sus sentidos en el momento de escribir… Soy un aparato para grabar… No pretendo imponer "relato", "argumento", "continuidad"… En la medida en que consigo un registro Directo de ciertas áreas del proceso psíquico, quizá desempeñe una función concreta… No pretendo entretener…

Naked Lunch, W.S. Burroughs.

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Chica semichilanga busca el sentido de la vida y la respuesta al secreto de la misma... con intentos fallidos